Mis datos

¿Cómo soy?

Mi historia

Carmiña y Regina son madre e hija. Llegaron a nosotros tras un transporte un tanto tortuoso lo que las provocó un bloqueo importante. Carmiña es la madre, una perrita muy sensible. Lleva mal la manipulación, arnés etc. Se asusta pero no hace un mal gesto aunque cuando ya va conociendo a la persona parece que se deja hacer un poco mejor. Al principio de llegar, los paseos por zona de parque los hacía muy temerosa incluso aunque todo estuviese calmado a su alrededor. Ahora empieza a ir un poco mas relajada, incluso olfateando a su paso. Los estímulos del tipo bicis, corredores etc hacen que se asuste si pasan muy cerca. El tráfico tampoco le gusta nada pero no llega a pararse, ella sigue caminando. Empieza a gustarle el contacto con la gente cuando ya crea bastante vínculo (de hecho de todos los voluntarios que interactuamos con ella, solo dos personas han logrado ganarse cierta confianza, y solo con una compañera ha logrado hacer "cosas de perro" en el patio de recreo del tipo saltar por la arena o excavar). Su nivel de actividad diríamos que es media, aunque es un poco difícil de valorar pues sigue bastante cerrada. Su relación con otros perros no es del todo buena. Suele regañarles si se acercan a conocerla, seguramente por ese miedo que predomina en su vida, y posiblemente por una nula socialización cuando era cachorra/joven. Solo en zona de parque ha saludado a alguno en alguna ocasión oliéndole y dejándose oler. Su familia ideal debe ser una con experiencia, paciencia para trabajar con ella y ayudarla, con mucho amor para darle, residiendo en zona tranquila y sin niños.